Con bronce, tenemos otra medallista en París.

Con el corazón lleno de orgullo y la mirada firme en sus sueños, Rosa María Guerrero logró una hazaña que enaltece a todo México: la medalla de bronce en lanzamiento de disco en los Juegos Paralímpicos de París 2024. Este triunfo marca la segunda presea para la delegación mexicana en esta justa deportiva, reafirmando la tenacidad y espíritu indomable de esta atleta excepcional.

Rosa María, originaria de Mazatlán, Sinaloa, ha recorrido un camino de esfuerzo y superación que comenzó en el fútbol, el deporte que la acompañó durante sus primeros años. Sin embargo, un diagnóstico en 2010 que le provocó paraplejía no fue suficiente para detenerla. Con una determinación inquebrantable, Rosa María no solo se mantuvo en el mundo deportivo, sino que encontró en el paratletismo su verdadera pasión.

Su historia en el lanzamiento de disco inició apenas cinco años antes de sus primeros Juegos Paralímpicos en Tokio 2020, donde conquistó su primera medalla de bronce. Y ahora, en París 2024, ha reafirmado su lugar entre las mejores del mundo al repetir la hazaña. Bajo la guía de su entrenador Iván Rodríguez y motivada por su amor por el deporte, Rosa María ha demostrado que no hay límites cuando se tiene el coraje de luchar por los sueños.

“Hay que disfrutar esta medalla y disfrutarme a mí, de lo que he logrado. Aquí estoy, con la frente en alto, diciéndome a mí misma ¡Felicidades, lo lograste!”, expresó Rosa María tras su emotiva competencia en París. Estas palabras son el reflejo de años de esfuerzo, disciplina y una inquebrantable fe en sí misma.

Su camino ha estado lleno de logros notables. En 2017, Rosa María obtuvo la medalla de bronce en el Campeonato Mundial de Londres, y dos años después, en los Juegos Parapanamericanos de Lima, se coronó con la medalla de oro. Estos éxitos le valieron el Premio Estatal de Deportes en Sinaloa en 2017 y 2019, consolidándose como una de las grandes figuras del deporte paralímpico mexicano.

¡Felicidades, Rosa María!