Van 10 los muertos por tornados y huracán Milton en Florida.

El huracán Milton ha dejado al menos 10 personas fallecidas en Florida, cinco de ellas debido a los 23 tornados que azotaron el estado antes de que el ciclón tocara tierra.

 Estos tornados sorprendieron a los residentes, generando una destrucción masiva y caos, especialmente en el condado de St. Lucie, donde se confirmaron cinco muertes en la comunidad de adultos mayores Spanish Lakes Country Village, ubicada en Fort Pierce.

El alguacil del condado, Keith Pearson, señaló que los equipos de búsqueda y rescate continúan peinando las zonas afectadas, donde cientos de casas resultaron dañadas o destruidas. Mientras tanto, en el condado de Volusia, el alguacil Michael J. Chitwood confirmó otras tres muertes, y en St. Petersburg, al oeste del estado, se registraron dos fallecidos más.

El huracán Milton, que tocó tierra en la costa oeste de Florida como una tormenta de categoría 3 cerca de Siesta Key, dejó casi tres millones de personas sin electricidad y generó intensas inundaciones y vientos de hasta 150 kilómetros por hora. A pesar de que se degradó a categoría 1, la amenaza de marejadas ciclónicas y lluvias torrenciales sigue latente en gran parte del estado.

El Centro Nacional de Huracanes advirtió sobre la posibilidad de nuevas inundaciones repentinas, mientras que el presidente Joe Biden fue informado de los "impactos iniciales" del huracán. El gobernador de Florida, Ron DeSantis, instó a los ciudadanos a permanecer en casa, advirtiendo sobre los peligros de las marejadas ciclónicas y las aguas de las inundaciones.

Milton se dirige hacia el interior, amenazando a ciudades como Orlando, donde el parque temático Disney World ha cerrado sus puertas debido a la tormenta. Se espera que las condiciones meteorológicas extremas sigan afectando la región, con vientos y lluvias intensas.

Los expertos señalan que el cambio climático está exacerbando la intensidad y frecuencia de tormentas destructivas como Milton. Las temperaturas más altas en la superficie oceánica permiten una mayor evaporación de agua, lo que intensifica el poder de las tormentas al formarse, provocando eventos climáticos cada vez más destructivos.

Con miles de afectados y millones sin electricidad, Florida se enfrenta a una larga recuperación tras el devastador impacto de Milton, que ya ha dejado su huella en la historia de tormentas del estado.